Análisis grafológico 4

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© Pilar Sánchez-Cañete
© Pilar Sánchez-Cañete

La letra grande nos habla de una persona con orgullo íntimo, así como con cierta tendencia a la generosidad en todas sus manifestaciones.

La letra g que baja mucho en su trazo inferior suele corresponder a una persona que, en el fondo, le gusta profundizar en todo lo que pasa por su vida, así como un deseo de afirmarse en todo lo que hace. Con otro tipo de letra podría hablarnos de una persona a la que le preocupa más la parte material que la espiritual.

En su trazado pausado puede considerarse como alguien con cierta actividad intelectual constante, así como una persona reflexiva y serena.

En su escritura vertical se aprecia que es una persona estable y con carácter firme.

En el margen derecho casi inexistente nos habla de una persona que le es difícil a veces mantener el presupuesto, es decir, que gasta sin tener demasiado en cuenta sus posibilidades, pero así mismo habla también de una persona sociable y muy dispuesta a ayudar a sus semejantes.

En la U mayúscula puede verse cierta gracia en el trato con los demás y, posiblemente, una tendencia al gusto por la música y principalmente por el baile.

En la firma se puede apreciar sencillez y un sentimiento de igualdad frente a sus semejantes. El cuerpo de letra grande, así como la firma, nos demuestran que es una persona que, al margen de ciertas dudas, angustias pasajeras, en general se le pude considerar con grandes rasgos de seguridad en sí misma.

Su letra clara nos refleja que es una persona con espíritu de justicia, lucidez y cortesía.

La presión firme habla de una persona con gran energía y firmeza en todo lo que hace.

En general, la letra unida se puede considerar como perteneciente a una persona de una gran lógica, sin por ello estar exenta de ciertos golpes fuertes de intuición que se aprecian en la separación de algunas palabras.

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