Miami, 3 jul (EFE).- Activistas comunitarios e inmigrantes se concentraron ayer en Miami para pedir al congresista republicano Mario Díaz-Balart que defienda con su “liderazgo” el “verdadero espíritu” de la reforma migratoria que se tramita en la Cámara de Representantes.
Díaz-Balart es un político con un “clara trayectoria de apoyo a las medidas proinmigrantes”, por lo que le pedimos que asuma su “liderazgo” para redactar un proyecto de ley de reforma migratoria que “no deje a millones de trabajadores y familias en las sombras”, dijo a Efe Natalia Jaramillo, de la Coalición Inmigrante de Florida.
La reforma, aprobada el 27 de junio en el Senado, abre la vía para la legalización de casi 11 millones de personas indocumentadas, al tiempo que obliga al fortalecimiento de la seguridad fronteriza, entre otras medidas.
Para Jaramillo, la aprobación del proyecto de ley en el Senado resulta “esperanzador”, aunque deja un cierto sabor “agridulce” al implicar la “militarización de la frontera”.
A la postre, sin embargo, lo esencial de la aprobación de esta reforma bipartidista en el Senado es que “mantiene un camino hacia la ciudadanía” para los sin papeles. “Eso es lo positivo”, resaltó la activista.
La concentración tuvo lugar en el Cuban Memorial Plaza de Miami, dentro de los actos convocados con motivo de la semana del día de la independencia y de la celebración del 4 de julio, con la participación de miembros de la comunidad inmigrante, junto con músicos y artistas locales.
Queremos recordarle al congresista republicano por Florida el “papel tan importante que juega” en la aprobación de una reforma migratoria integral y que no permita que “se obstruya la voluntad de la ciudadanía, de la mayoría” de los votantes de este país.
Díaz-Balart, precisó, “ha apoyado la reforma migratoria durante años” y este es el momento de que haga valer todo su liderazgo para su aprobación.
El colectivo inmigrante en Florida reclama a Díaz-Balart que utilice, para sacar adelante el plan reformista, su destacado papel como miembro del Grupo de los Siete que negocia la reforma en la Cámara de Representantes, uno menos que los ocho del Senado, después de la renuncia del republicano Raúl Labrador.
“Nuestra nación fue construida por inmigrantes en la búsqueda de la libertad. Esta semana rendimos homenaje a esa lucha recordando a los líderes que la aprobación de la reforma migratoria con un camino hacia la ciudadanía es la única manera de mantenernos fieles a nuestros valores”, señaló en un comunicado Kathy Bird, de la Coalición de Inmigrantes de Florida.
Bird subrayó que la Cámara de Representantes “sólo ha debatido legislaciones antiinmigrantes en lugar de trabajar por una reforma migratoria integral que brinde un camino a la ciudadanía para los 11 millones de inmigrantes que forman parte de la economía y el tejido cultural de los Estados Unidos”.