Washington, 26 ene (EFEUSA).- Los positivos datos económicos apuntan a que la reunión de la Reserva Federal de esta semana, la última presidida por Ben Bernanke antes de dejar el cargo el 31 de enero, continuará con la senda marcada en diciembre de gradual retirada del multimillonario plan de estímulo monetario.
En el encuentro del Comité Federal de Mercado Abierto del 28 y 29 de enero pocos dudan de que el actual volumen mensual de compra de bonos, de 75.000 millones de dólares, se reduzca nuevamente.
“Probablemente continuaremos en un camino de reducciones graduales y comedidas en el ritmo de las compras, asumiendo que la economía evoluciona como esperamos que lo haga”, dijo este mes John Williams, presidente de la Reserva Federal de San Francisco.
La cuestión es saber si será de nuevo de otros 10.000 millones de dólares, como ocurrió en diciembre.
Desde la reunión de entonces, los indicadores mostraron un repunte de la actividad económica mayor
del esperado en el último trimestre hasta un ritmo anual de expansión del Producto Interior Bruto (PIB) del 4,1 por ciento y un nuevo descenso de la tasa de desempleo hasta el 6,7 por ciento en el mes de diciembre.
Asimismo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó la pasada semana al alza las previsiones de crecimiento del país para 2014 a 2,8 por ciento, frente al 1,9 por ciento de 2013.
“El rebote en 2014 será llevado a cabo por la demanda interna, y apoyado en parte por la reducción en el freno fiscal como consecuencia del reciente acuerdo presupuestario”, afirmó el FMI en la actualización de su informe de “Perspectivas Económicas Globales”.
A la luz de este panorama, el economista jefe del Fondo, Olivier Blanchard, señaló que la reducción de 10.000 millones de dólares es la “apropiada”, y agregó que es “fundamental” que la Reserva Federal continúe con su progresiva retirada del estímulo monetario a medida que la economía mejora, pero que “lo haga evitando una retirada prematura”.
También los mercados parecen anticipar el fin de los tiempos del “dinero fácil”.
Wall Street cerró el viernes con una fuerte caída y el Dow Jones de Industriales cayó más de más de 300 puntos, un 1,96 por ciento, en medio de los problemas en varios países emergentes, cuyas divisas han registrado bajadas respecto al dólar en la última semana, y las señales inequívocas por parte de la Fed en su intención de continuar con la salida del estímulo.
Tras la reunión de la Fed, Bernanke dejará el cargo a quien hasta ahora era su “número dos”, Janet Yellen, lo que garantiza el continuismo en la política monetaria estadounidense.
Bernanke ha sido el arquitecto de la ultraexpansiva política monetaria que, desde el estallido de la crisis financiera como consecuencia de la burbuja inmobiliaria en 2008, ha mantenido los tipos de interés de referencia entre el 0 por ciento y el 0,25 por ciento y lanzado tres rondas multimillonarias de inyección de liquidez.
Yellen será, por tanto, la encargada de capitanear la progresiva retirada del plan, una vez que la economía ha comenzado a dar señales de consolidación, y calibrar la salida en función del contexto.
La primera reunión de la Fed con Yellen como presidenta tendrá lugar el 18 y 19 de marzo, y para entonces está previsto que comparezca en conferencia de prensa.
Estas ruedas de prensa, una novedad en el siglo de historia del banco central, son otro de los legados de Bernanke, quien las impulsó como parte de su estrategia para aumentar la transparencia de la institución.