Santiago de Chile, 26 nov.- El presidente de Chile, Sebastián Piñera, aseguró hoy tras recibir a la directora general de Unicef, Henrietta H. Fore, que la protección y desarrollo de la infancia es uno de los cinco grandes ejes de su Gobierno.
Piñera destacó que el llamado Acuerdo Nacional por la Infancia constituye una hoja de ruta sobre la que el Ejecutivo “se encuentra trabajando para proteger a aquellos que han sido vulnerados y para promover el desarrollo integral de todos los niños y niñas de nuestro país”.
El presidente conversó con la titular de Unicef sobre las prioridades del Gobierno en infancia y destacó un nuevo modelo de residencias familiares, una reforma a los programas del Servicio Nacional de Menores (Sename) y el Sistema de Alerta Niñez, para intervenir casos vulnerables de manera eficaz.
Según un comunicado de Presidencia, el mandatario ya está implementando 84 medidas de las propuestas del Acuerdo Nacional por la Infancia, entre las que se destacan el Programa de Revinculación Familiar, la Ley de Protección Integral de los Derechos de la Niñez y la Ley Kínder Obligatorio, entre otros.
Fore, que por primera vez visita Chile, fue acompañada en la cita del Palacio de La Moneda, por el representante de Unicef en Chile, Paolo Mefalopulos, y de la subsecretaria de la Niñez, Carol Bown.
Por su parte, Piñera estuvo acompañado por los ministros de Desarrollo Social, Alfredo Moreno, y de Justicia y Derechos Humanos, Hernán Larraín; por el subsecretario de Justicia, Juan José Ossa; la subsecretaria de la Niñez, Carol Bown; y la directora del Sename, Susana Tonda.
El pasado 5 de agosto, Piñera firmó un proyecto que pone fin al cuestionado Servicio Nacional de Menores (Sename), en el que murieron mas de un millar de niños y por el que Naciones Unidas acusó al Estado de “violaciones graves y sistemáticas” en los centros de menores.
El Sename ha sido criticado durante años, pero su crisis estalló en abril de 2016 con el deceso de Lisette Villa en uno de sus centros, quien falleció asfixiada cuando sus cuidadores la sometieron a apremios ilegítimos y tormentos, según un informe del Servicio Médico Legal aportado por la Fiscalía.
Poco después, en octubre de 2016, la opinión pública chilena se conmovió con la noticia de que 1.313 niños murieron en centros colaboradores del Sename en los últimos 11 años, donde los menores eran violados sistemáticamente como lo confirmó la ONU.
Aquel escándalo derivó en una interpelación a la entonces ministra de Justicia, Javiera Blanco, quien finalmente acabó renunciando al cargo.